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domingo, 17 de marzo de 2024

rt--Funcionalidad gatuna--ic


No tiene otro sentido, más que lo ornamental, un gato sin ratones que cazar; cosa que explica el dramatismo de esta foto y todos los pelos que no se aprecian en el escritorio.

Mientras esto sucede, mi pensamiento agudo y analítico, afilado como un canto rodado; Murf permanece irritantemente impasible, sin problema.



Iconoclasta

Foto de Iconoclasta.

lunes, 10 de julio de 2023

rt--Las cosas bellas tienden al corporativismo--ic

Se juntan, reúnen, asocian y compiten.

Se solapan bellezas y coloridos unos sobre otros en un caos de hermosa psicodelia.

Tanto que me hacen ajeno al planeta. Me pregunto qué cojones hago yo aquí, tan gris, tan incoloro…

Tan neutro y anodino.

Corporativistas orgullosas…

No comprendo mi existencia en el planeta ante la Corporación de la Belleza y el Color.



Iconoclasta

martes, 11 de abril de 2023

rt--El árbol que quiso ser dios--ic

No es grande, no llega a tocar el cielo; pero al final logró ser dios y ahora rige solitario, en una bola de cristal invisible, su eterno y exclusivo mundo donde luce majestuoso, entre cielo y rocas. Y a su espalda, los miles de adocenados árboles del bosque hacinados, lo observan con desdén lucir su fronda de miles de pequeñas flores radiantes.

Si dios no ha castigado su vanidad partiéndolo con un rayo, se debe a que tenía razón en su vanidad: es tan bello como un dios.

Y bueno, aunque pedantes, ciertas perfecciones se agradecen en este sórdido mundo de fealdades banales e intrascendentes, a duras penas vivas.



Iconoclasta

Foto de Iconoclasta.


jueves, 22 de septiembre de 2022

rt--Un trepador azul--ic

 

No se conforman con volar, tienen que trepar arriba y abajo por los árboles.

Volar es demasiado fácil, demasiado vulgar.

Son buenos escaladores…

Y yo solo hago lo fácil.

Mierda…

Verticalmente, cabeza abajo avanzan tan veloces como hacia arriba.

En la ribera del río, donde escribo a menudo, se me queda suspendida la pluma a unos milímetros del papel observándolos. Y me doy cuenta de que no es necesario escribir, solo ser. Al final, carezco de importancia.

Soy menos que ellos.

Escribir es una patética vanidad, un intento por trascender a nada.

Cuando el silencio es largo y sin roturas, se acercan y me miran desde el árbol girando la cabeza con curiosidad, me arrancan una sonrisa secreta. Y al cabo de un instante, se acercan a mis pies sin timidez.

Pero cuando se acercan las estridentes voces humanas o sus horribles músicas ajenas a ellos; se van.

Y me dejan solo con los que no quiero.

Quisiera trepar y volar tan veloz como ellos, para alejarme con rapidez de los otros, los invasores. Y no puedo, soy de una torpeza que me da vergüenza escribir.

Nací estropeado, o algo pasó que no fue bien en mi concepción.

Si fuera un trepador, no me acercaría a alguien como yo, tan anodino… Pero son buenos tipos. Demasiado buenos.



Iconoclasta

Foto de Iconoclasta.


domingo, 10 de julio de 2022

La balsa


La balsa está podrida porque no hay agua limpia que la llene. Y la que le llueve es orina, orina enferma y vieja.



 

Iconoclasta

Foto de Iconoclasta.

viernes, 27 de mayo de 2016

Impresionismo



Yo también soy un impresionista. Mi mundo, el que yo creo y su luz, es una mejora de los errores humanos y de la naturaleza.
Si me pusiera en plan teológico, estaría reparando lo que dios hizo mal.
La luz y textura que aplico al universo, oculta los desperfectos, las miserias, la vejez y la ordinariez. De tal forma, que parezca una pintura para enmarcar.
Porque sin mis correcciones puntillistas, sería más de lo mismo. Me pudro entre tanta monotonía.
Vine al mundo para hacerlo todo más interesante.
Y más decorativo.
Ni la naturaleza, ni los dioses son tan sabios como todo el mundo afirma.
Conformistas indolentes...


miércoles, 11 de mayo de 2016

Quiosco de vida


Era una mañana de febrero, fría y lluviosa. Y un café bajo los soportales del Zócalo de Puebla, era un placer íntimo. En solitario los cafés saben de una forma especial, porque bebes los recuerdos y las miserias solapado por la indiferencia del trajín de un quiosco de prensa saturado de vida.
Dado el ruido habitual de la ciudad, era un paraíso temporal. Una efímera tranquilidad que valía la pena disfrutar en silencio.
Era 2012, pero podría ser el futuro, o cualquier pasado reciente. Fumar y tomar un café en soledad en un mundo abigarrado, es un lujo intemporal.
Brindo con un café por el cobijo de un quiosco y su indiferencia.

(Zócalo de Puebla, México. Febrero 2012).



martes, 8 de marzo de 2016

Cuernos para erecciones de idiotas


¿En qué momento los monos decidieron que sus cuernos eran necesarios para que sus pollas se pusieran duras? Da igual si es una cultura oriental u occidental, los monos evolucionaron envidiosos de otros seres con más fuerza y más territorio en todas las regiones del planeta que ensuciaron con su presencia.
La evolución del hombre, no es tal. Los humanos son un accidente, una degeneración de la naturaleza en el planeta.
Pronto serán viejos recuerdos o cromos mal dibujados en pastelillos. Nadie se acordará de que unos miles de degenerados de polla blanda, pensaron que sus cuernos curaría sus penes ridículos.
Lo más divertido es que los monos (hombres), ni con la polla dura saben follar.
Los religiosos deberían recapacitar sobre un Dios de mierda creador.
¿Creador de qué?



domingo, 24 de enero de 2016

Masacre


No es una masacre, es una necesidad; pero parece un camposanto de árboles.
Los humanos lo hacen consigo mismos. Lo hacen principalmente por envidia, lo que lleva al odio, por religiones y por ideologías de iluminados con ansias mesiánicas. Cosa que me parece correcta la masacre humana. También es una necesidad, es una herramienta que si no sirve para depurar la especie humana, al menos alivia el espacio, que también es importante.
Si vale para unos, vale para otros seres del planeta.



sábado, 22 de agosto de 2015

La cancela


Una cancela que no guarda nada, que no puede defender nada.
Hay inseguridades y miedos por todas partes, clavados en la tierras, en las carnes y el pensamiento.
La vanidad de ser propietario se paga con tiempo perdido, con esfuerzos que solo provocan un ridículo que no ven, porque de nuevo, la vanidad es ciega y sorda. E idiota.
Es absurda.
Son absurdos y previsibles.