martes, 24 de febrero de 2015

Iconomonstruo


Soy el payaso de las noches insomnes, una gárgola que espanta el verdadero mal de las noches de ojos abiertos.
Porque verán en mí, que no hay nada peor que ser yo mismo. O sea, pueden dormir tranquilos de no tener el antojo exótico de ponerse una máscara que te dobla las pestañas de una forma dolorosa durante todo el proceso de ponérsela, y luego, para mayor inri, acertar al botón de la cámara con toda esa ceguera.
Mi cabeza es tan grande como lo que se necesita para alojar mi gran cerebro, no es vana la desmesurada talla.
Es como ser diana de una feria de: "A ver quien manda primero a la mierda al pesado".



domingo, 28 de diciembre de 2014

Dos viejos y amigos


Se escuchan detenidamente, ajenos al ruido de la música, como si no fuera con ellos el estruendo.
Como si fueran demasiado viejos para que algo interrumpa su conversación.
Su larga y añeja conversación.



Muy cerca del Izta


Dicen que yace una mujer dormida.
Es bonito creerlo, es mágico.
No puede hacer daño.


Banquete mexicano


Unas guirnaldas que no pueden faltar, unas lonas contra el abrasador sol de las alturas y una tranquila tarde de boda.
Nadie pide ni quiere demasiado. La sencillez y la generosidad es una buena combinación humana y de colores.


miércoles, 17 de septiembre de 2014

La Santísima Trinidad


La verdadera.
Una cruz enorme y amenazante, es el verbo, los grilletes son la fe que hace ciegos a los hombres. El cuchillo es el brazo firme y ejecutor de las leyes divinas. De las envidias y miedos.
La paloma, el cordero y el ojo que todo lo ve, esa iconografía religiosa, son solo cosméticos de una realidad dura que hace mierda la libertad y la inteligencia.
Solo falta el dildo para completar del todo el altar, la sodomización de unos pocos a una multitud de reses temerosas.
Mierda...


martes, 9 de septiembre de 2014

El tiempo y los cadáveres

A veces no es necesario el uso de calendarios y relojes, basta ver como se pudre un perro durante horas en una calle de la ciudad para darse cuenta que pasan los días a medida que su vientre se hincha.
Lo bueno de la fotografía es que no registra olores.
Puta pena...